SANTA CLARA, UN MONASTERIO VIVO

Conocemos esta Comunidad desde hace años, y mantenemos una gran relación ella, porque las monjas que allí viven siempre nos han tendido la mano, su tiempo y lo suyo cuando así lo hemos necesitado. Encuentros, Seminarios, Jornadas de Formación, Reuniones, ..., en un entorno inigualable, en un recurso patrimonial pero también personal y espiritual único en las Merindades.

No sabíamos si podríamos compartir un SECRETO tan fantástico de este territorio con tod@s vosotr@s, porque era fundamental saber conjugar su labor hacendosa, solícita y cuidadosa de sus valores con el secreto de un Monasterio Vivo. Y con una Comunidad que ha custodiado y preservado desde la sobriedad y la humildad uno de los bienes más preciados de nuestra comarca. Y que lo ha hecho compatibilizándolo con su vocación, su misión principal,  desde la concesión y el esfuerzo para la puesta en valor y el acercamiento del patrimonio a quienes vienen a conocernos, con un espléndido Museo y una Hospedería que ofrece una alternativa diferente.

Una vez más nos han sorprendido con su disponibilidad y colaboración. Qué suerte tenemos de que sigan aquí, formándose y trabajando en restauración de tabla y orfebrería, deleitándonos con sus dulces y sus voces, ofreciéndonos desinteresadamente la posibilidad de contar con este Monasterio Vivo en las Merindades.

Muchas gracias Sor Rosa, muchas gracias a toda la Comunidad por permitirnos disfrutar de una jornada de grabación que sin duda para todos nosotros quedará en la retina como algo único, por su sonrisa y por su alegría, y por supuesto por permitidnos asomarnos a su Secreto.